Dos principales tendencias Retail: la revolución del consumidor y la tecnológica.

La nueva década será continuista en cuanto a las grandes tendencias pero la batalla se sofistica. Solo los que adopten de forma ágil las estrategias relacionadas con ambas tendencias podrán competir adecuadamente en los próximos años.

2020 no es solo comienzo de un nuevo año pero coincide también con el inicio de una nueva década. Dejamos atrás dos lustros marcados por una transformación muy profunda para el Retail y, especialmente, para la industria de la moda. En estos últimos diez años el sector ha experimentado un proceso digitalización sin precedentes. Se ha sometido a revisión prácticamente toda su cadena de valor ; desde el producto pasando por la producción hasta la transformación de la distribución y la reinvención de estrategias de marketing y ventas.

Al mismo tiempo, según venimos observando, la industria de la moda ha entrado en una senda de desaceleración. En términos de ventas se ha iniciado un proceso de cambio a nivel de la relación con el cliente ; mucho más exigente y activo en su relación con las marcas. Este último ha sido, posiblemente, el cambio de reglas que más ha afectado a la moda en términos de su go-to-market y a nivel tecnológico ; generando nuevos enfoques de experiencia del cliente.

Hace diez años asistíamos a la explosión del e-commerce con su correspondiente amenaza llamada Retail Apocalypsis. La expansión global de muchos players nuevos como Amazon o Alibaba han agitado de forma profunda el mercado. Hoy aún es latente la sombra de la desaceleración económica y la consolidación de nuevos competidores y plataformas. La moda tiene que seguir innovando y mejorando sus procesos para prepararse adecuadamente para los próximos diez años.

¿Cuáles son las tendencias que predominarán en la industria en los próximos años? 

Next generation client

El cliente ha sido el gran protagonista de la última década y lo seguirá siendo en los próximos años. A pesar de que esta tendencia no es nueva y el Retail lleva ya años sentando las bases de una nueva relación, la nueva década traerá aún más dinamismo. Además de un mayor impacto del feedback del consumidor a diferentes niveles. En términos de marketing, el Retail buscará nuevos caminos, más allá de las plataformas sociales establecidas, para establecer relaciones con sus clientes. Se apuesta por la dinamización de sus propios canales y un call to action basado en la inteligencia del dato y la personalización.

La recalibración del punto de venta

Las tiendas físicas seguirán en proceso de revisión con una tendencia hacia formatos más pequeños y ágiles en cuanto a la superficie comercial. Además de contar con una trastienda más grande que permita convertir la tienda física en un verdadero centro de distribución para las compras omnichannel.

La reinvención tecnológica

Tras unos años marcados por el hype tecnológico dentro de la parte más visible de la tienda, la nueva década estará marcada para los Retailers por la verdadera reinvención techie. En la parte menos visible del punto de venta físico para el consumidor. Tecnologías de Advanced Analytics, gestión dinámica de stocks para conseguir un Stock único, el pago por el móvil y las cajas self check out son algunas de las tecnologías que más ayudarán a los Retailers en su reinvención en el punto de venta. Algunas de esas tecnologías, las basadas en datos, podrán decirle al vendedor qué debe hacer para alcanzar su objetivo diario de ventas. O también qué valor debe tener su próximo ticket de venta y qué productos debe vender y a cuántos clientes debe servir. Tecnología enfocada a la toma de decisiones y con impacto real en ventas.

El poder de la predicción

Los datos son el nuevo oro del siglo XXI y, no en vano, Harvard Business Review apuntaba hace algunos años que Data Science es la disciplina más deseable del mundo. El avance de la presencia digital de las compañías, el omnipresente mobile first, las redes sociales y el cloud están creando dentro de los Retailers un nuevo ecosistema de datos caracterizado por un gran volumen y mucha variedad. El dato en sí no podrá aportar valiosos insights para ayudar a crecer los negocios si no hay detrás un algoritmo que analice los comportamientos y ayude a dar una visión de futuro al Retailer y a tomar decisiones. El dato estará cada vez más sometido a la cuantificación, predicción y toma de decisiones. Las soluciones tecnológicas del futuro que van a ayudar al Retailer serán aquellas que verdaderamente aporten una solución y vayan más allá del dato por el dato.

El stock: único y dinámico

A medida que avanza la omnicanalidad, entendida como una visión única del Retailer de sus canales de venta, su surtido y su relación con el cliente, incrementa la complejidad de gestión de stocks. Lograr tener un control sobre el comportamiento de ventas es clave para poder responder con agilidad a los traspasos, los reapro, las roturas de stocks y las promociones en los diferentes puntos del complejo tejido de distribución física y digital de los Retailers y contar con una solución que permita darle dinamismo al stock será clave para reaccionar a posibles cambios de tendencias en ventas, un fenómeno cada vez más común en el sector.

Junto a estas cinco tendencias clave, que van muy ligadas a la consolidación de la digitalización e innovación del Retail, hay un importante movimiento adicional. Se trata de un movimiento que empieza a ocupar las agendas de los directivos del sector y es la sostenibilidad. Según numerosos informes, entramos en la década de la sostenibilidad que deja de ser una preocupación de los grandes y escala a todas las empresas de la Moda y Retail. En este sentido, los Retailers tendrán que ir sumando el compromiso con la acción climática al tiempo que siguen innovando y digitalizando el core de sus negocios.